“Yo noté que la niña no hacía los movimientos “normales” de un bebé de su edad, por lo que busqué atención de médicos privados, todos decían que mi hija no iba a caminar o hablar, pero no perdí la esperanza, hoy ella tiene casi un año, ya gatea y dice algunas palabras», esto fue lo que nos expresó Tania Castillo, Mamá de Alejandra Nicole a inicios de 2015.
Alejandra Nicole llegó por primera ver al Instituto Médico Pedagógico Los Pipitos cuando tenía 9 meses de nacida, su diagnóstico es retraso psicomotor. La conocimos antes de cumpliera su primer añito, cuando empezó a recibir terapias en la Unidad de Educación Temprana, donde se atiende a niños y niñas de 0 a 6 años. En ese entonces, Alejandra tenía 3 meses de haber iniciado sus terapias, con las que había logrado pequeños pero significativos avances, pues ya gateaba, aplaudía, decía adiós con sus manitos y estaba empezando a hablar.
En 2016, con dos años y medio de edad, Alejandra sigue asistiendo a sus sesiones de terapia grupal e individual cada martes en la Unidad de Educación Temprana, donde sigue trabajando en mejorar su marcha y habla, pues ya camina y ha desarrollado más su lenguaje, “aún estamos trabajando en que mejore de su la postura del piecito, ella camina y corre pero por la forma en que pone el pie algunas veces se cae, también su lenguaje se va desarrollando conforme a su edad y cada día sigue mejorando, por eso no dejo de traerla a las terapias. Esta es nuestra segunda casa porque tanto ella como yo hemos hecho varios amigos, en las terapias grupales ella disfruta compartir con los otros niños y niñas, y yo aprendo de las experiencias de los otros padres”, dice Tania.
Así como Alejandra Nicole, muchos niños y niñas del país tienen la oportunidad de recibir terapias desde edad temprana gracias a las donaciones que año con año los nicaragüenses hacen a Teletón, con las cuales tenemos la oportunidad de mejorar las condiciones de vida de niños, niñas, adolescentes y jóvenes con discapacidad.
